Puente Romano de Portomarín
(En
sus inicios).
Coordenadas (En grados decimais) --->
42.802395 N , 7.617889 W
Escribe
Secundino Lorenzo.
Email.
Ponte "Pedro Peregrino" de Portomarin.
Desconozco el autor de la fotografía. Por cierto de muy
poca calidad la copia...
Este puente
era romano. Parece ser que
Dª Urraca la mandó destruir
en su lucha con su segundo esposo Alfonso
el Batallador, en el año 1112.
Sobre su base romana parece que no hay dudas,
en estas fotografías pueden apreciarse
los sillares y también las partes de fábrica que punían
en los puentes en forma triangular y que permitían al
agua ir
por uno o otro lado, o sea cortar la corrente,
se llaman tajamares.
El puente tenía
152 metros de largo con
un ancho de 3,30 m. Desconozco
los arcos que tenía, pero por
lo menos
debía tener entre nueve
y once...Parece ser polos comunicados de
los
accidentes que tenía once arcos.
Otra vista del puente.
Reconstruida posteriormente por "Pedro
Peregrino" en el año 1126, por eso
llevaba ese nombre:
por suposto ya con un estilo medieval y finalmente
se sabe que en diciembre de 1801 cae
parte del ponte, concretamente un arco, en una riada y
luego en el año 1895 otra riada llevó
la parte central.
Otra vista del ponte.
Sobre
la
riada de 1895 voy a poner un texto que saco dde un reportaje
aparecido en "Galicia Dixital":
"El
gran puente romano de Portomarín nació con mala estrella.
Era tan necesario y estratégicamente tan importante que
por eso la reina doña Urraca lo mandó destruir, Pedro
Peregrino lo reconstruyó. Los avatares del tiempo
siguieron haciendo mella en el “gigante”. Los ineptos
gobernantes de aquella época no supieron valorar su
importancia económica y social; por eso lo dejaron al
albur de los temporales, sin emplear un real en su
conservación.
Tanto el Rey como el Comendador de Portomarín se valen
todavía de este maltrecho puente para cobrar buenos
impuestos, pero no invierten un solo maravedí en
repararlo. Consecuencia: el puente termina
convirtiéndose en intransitable y Portomarín queda
aislado. La hermosa “joya” romana se va destruyendo
paulatinamente, ya sea por efecto de los temporales, ya
por la depredadora mano del hombre.
El desmoronamiento definitivo del gran puente romano de
Portomarín ocurre a las once de la mañana del día 5 de
febrero de 1895. Ese mismo día el Alcalde de la villa,
Cándido López, se dirige al Gobernador Civil de la
provincia para darle cuenta del trágico suceso. El
comunicado del Alcalde aparece publicado
en el diario “El Regional” de Lugo, el día 8 de
febrero de 1895, y reza así:
“Un puente en ruínas”
“A las once de la mañana del día de hoy, se ha
desplomado el arco central del puente de esta villa,
situado sobre el río Miño. Otros dos arcos, de los diez
que se conservan en pie, amenazan inminente peligro de
ruína, y quizá se derrumben antes de que V.S. reciba la
presente. Lo ocurrido fue solo obra de la mano del
tiempo, y afortunadamente no hubo desgracias personales
que lamentar.
Debo hacer presente a V.S. –sigue diciendo el Alcalde-
que sin este antiquísimo puente, único sobre el río Miño
en una extensión de más de once leguas, son inmensos los
perjuicios que va a sufrir este término municipal y los
de Paradela, Páramo, Sarria, Monterroso, Taboada y
Guntín, dándose el caso de no haber en la referida
extensión, o sea desde esa capital a Belesar, ni barcas
a propósito para alguna clase de tráfico, ni puntos
convenientes para establecerlas, con los solos medios
del país, sin riesgos de las personas y ganados.
La feria de Monterroso, una de las más renombradas de la
Península, queda sin la vía más usada para la
exportación de los ganados a los pueblos de Castilla; y
esta villa se ve privada de comunicación entre si misma
toda vez que la población de halla situada en ambas
riberas del río, unidas hasta aquí por el citado puente”.
La exportación de ganado a Castilla se hacía siguiendo
el camino real hacia Paradela, Sarria y Lemos que
partiendo de Portomarín pasaba por Fontedagra, San Juan
de Loio, A Reguenga, O Poste (San Martiño), Santalla,
Pacios, Sarria, San Vicente de Paradela, Riocabo de
Cima, A Serra (Santa Cristina), Foilebar, Mosteirovello
(Castro de Rei de Lemos) y Rubián (Bóveda), en dirección
al valle de Quiroga y Monforte de Lemos.
Otra posible ruta de exportación era la que actualmente
coincide con el camino de Santiago por tierras de
Paradela hacia Sarria.
Las autoridades municipales de Portomarín, más cercanas
a las necesidades de la vida cotidiana de las gentes del
entorno, comprendieron que el río sin puente, o sin un
servicio público paliativo se convertía en una barrera
casi infranqueable, que trunca la libre circulación de
las personas, animales y mercancías e impide el
desenvolvimiento general de los pueblos periféricos y de
la propia villa. Esa fue, sin duda, la razón fundamental
que motivó a la Corporación Municipal de Portomarín,
reunida el día 3 de julio de 1895, a tomar el acuerdo de
establecer “el paso gratuíto de personas y ganados a
medio de barcas sobre el río Miño entre las parroquias
de San Pedro y San Nicolás de Puertomarín, se saca a
subasta el indicado servicio por el término de un año,
cuyo importe será de 1000 pesetas.
"...
Fotografía de Juan José Vega. Aquí
se ve los dos arcos que quedaban a principios del siglo XX.
El puente que se ve es de 1930.
Posteriormente,
se fueron llevando partes del
puente que quedaba hasta
que en 1960 solo quedaban
dos arcos,
uno en el medio que se ve en la fotografía y otro en la parte derecha.
El embalse o presa de Belesar fue inaugurada por Franco en 1963.
Esto
es lo único que queda hoy cuando baja el agua de
la presa.
En este lugar el agua tiene más de 30 metros de profundidad. Observar un pilar del puente a
la izquierda del caneiro. Enfrente estaba Portomarín. Fotografía
Secundino Lorenzo.
Hoy
está bajo las aguas del embalse de Belesar. Solo queda un trocito de arco
en el
río y otro en tierra...
Fotografía actuales.
Vista del puente actual de la carretera de Sarria a
Portomarín, ya con el embalse a tope.
En la fotografía de abajo se ve río arriba
el caneiro, parte
del Puente Romano, el nuevo puente y el puente se que se hizo
para pasar de una a otra orilla antes de hacer el
embalse de Belesar (carretera de Sarria a Portomarín).
Dice
Angel Fernández López:
"El
arco central del puente romano de Portomarín se derrumbó el
día 5 de febrero de 1895. Desde esa fecha hasta 1930 en la
que se inaugura el segundo puente (el de los automóviles),
Portomarín se tiene que valer de una barcaza pública para el
transporte de personas, animales y mercancías entre ambas
márgenes del Miño. Este precario servicio (aunque más vale
algo que nada), aparte de incómodo e incompleto, hubo de
representar, en épocas de grandes crecidas, un enorme
peligro para quienes lo tuvieran que utilizar.
La licitación del nuevo puente se lleva a
efecto el día 7 de febrero de 1925 y dice así: “Se anuncian
a subasta las obras de construcción del puente sobre el río
Miño en el trozo tercero de la carretera de Lugo a
Portomarín, cuyo presupuesto asciende a 330.848,08 ptas.;
plazo de ejecución hasta el 30 de junio de 1928”. También se
subastan las obras de construcción del trozo tercero de la
carretera de Lugo a Portomarín, cuyo presupuesto asciende a
158.649,54 ptas. Plazo de ejecución: 30– junio, 1927.”
Tanto el puente como las carreteras
Lugo-Portomarín, y Sarria-Paradela-Portomarín se subastaron
y construyeron en tiempos de Primo de Rivera (1923-1930); el
hombre que desde el punto de vista de su política de obras
Públicas consiguió unos resultados ingentes: las carreteras
españolas fueron citadas por la prensa inglesa como las
mejores del mundo; se impulsó el desarrollo de la red
ferroviaria; se acometió un importante plan de obras
hidráulicas y se construyeron y pusieron en funcionamiento
numerosas escuelas.
Algunas personas mayores de Portomarín, de
excelente memoria sobre lo pasado, afirman que “A ponte
inaugurouse o día 10 de setembro de 1930. Os canteiros eran
de Pontevedra e ganaban dúas pesetas diarias; que o
enxeñeiro-contratista era orixinario de León e chamábase don
Román”.
Finalmente, el tercer puente de Portomarín,
el pueblo nuevo y el embalse de Belesar fueron inaugurados
por Francisco Franco en el mes de septiembre de 1963.
La antigua villa y sus encantos, los dos
puentes, los “caneiros”, las fértiles “veigas” y muchas
viñas quedaban para siempre sepultados bajo las aguas, y los
famosas anguilas que, en otros tiempos de abundancia, se
exportaban saladas a Castilla, quedaban privadas por las
presas de Peares y Belesar de su ruta natural de emigración.
También se quedó bajo las aguas el camino de
San Roque, conocido en la antigua villa con el nombre de
“Corga de San Roque”, que partía de la plaza de Santa Isabel,
situada al norte de la iglesia románica de San Nicolás, y se
dirigía hacia Ventas de Narón y Monterroso."
Portomarin anterior a 1960. Observar los dos
arcos del
Puente Romano. Uno en el medio del río
y el otro en la esquina izquierda. Ese arco de la
izquierda fue aprovechado
para ponerlo, hoy en día, fuera de las aguas del
embalse , y para decir que existió ese puente...
Fotografía de los restos del Puente
Romano de Portomarín "Ponte Pedro Peregrino" antes de 1960.
Aún estaba Portomarín en su lugar con la Iglesia de San Xoan
en la margen derecha.
Fotografía sacada desde el barrio de San Pedro.
Otra fotografía histórica de Portomarín. Autor desconocido.
Fotografía de Juan José Vega.
Fotografía de Víctor López V. Esta fotografía
ya es actual. Portomarín ya fue trasladado y se hizo un
nuevo puente.
Este puente sube más de 30 m. sobre el lecho del río.
En esta fotografía
aún está la parte
izquierda y un trocito en la parte
derecha.. Desconozco el autor de
la
fotografía y también el ano.
En este link teneis más fotografías.
Este trozo de
la parte derecha existía en el
año 1960. Luego con motivo del
embalse de Belesar fue
llevado fuera del
río y al final de
el puente grande construido.
Esto es el trozo de puente
que pasó para arriba,
al final del
puente, un arco romano y una torre defensiva.
Este puente romano era el que permitía
el paso en el Camino de Santiago, viniendo de Sarria, camino de
Piedrafita, el camino de Santiago. Puente fundamental para
los peregrinos.
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