17/04/2007. ADEGA viene de presentar sugerencias al rocambolesco proyecto de Iberdrola para hacer una central bajo el Cañón del Sil. Esta delirante infraestructura pretende bombear por la noche agua del Sil hasta la cima del cañón para luego turbinarla por el día y aprovechar las bonificaciones por energía renovable. Además de este fraude económico-ambiental, el proyecto se ubica dentro del LIC Canóns do Sil, parte de la Red Natura gallega y conllevará una brutal alteración paisagística en un lugar de excepcional belleza y atractivo turístico candidato a Patrimonio de la Humanidad.

El proyecto contempla la construcción de una central de bombeo turbinado enterrada al lado del pantano de Santo Estevo, en el ayuntamiento de Parada do Sil de donde se elevaría el agua hasta un pantano artificial de 37,5 hectáreas, a 800 metros en la cima del cañón. Desde aquí se deja caer por gravedad para turbinarla y producir electricidad. Tanto el pantano como las kilométricas conducciones subterráneas se localizan en las laderas del LIC Cañón do Sil, espacio integrante de la Red Natura gallega.

Es responsabilidad de los representantes municipales
el enterase de lo que firman y aprueban

Esta obra faraónica implica un importante movimiento de tierras y una intervención profunda (e nunca mejor dicho ya que agujerearía todo el macizo) un espacio protegido, provocando un terrible impacto al paisaje en un lugar donde es precisamente el paisaje su valor fundamental, foco de atracción turístico a nivel europeo.

Además de esto este tipo de instalaciones de energía hidráulica por bombeo esconde una cara oscura en su funcionamiento. No genera energía en su funcionamiento sino que aprovechan diferentes tarifas existentes para bombear, consumiendo energía por la noche y turbinando para generar energía por el día, de esta manera aprovechan las subvenciones existentes para las energías renovables. Y además es un hecho gravisimo que Iberdrola afirme que esta obra no va afectar al Cañón del Sil y que constituye un ejemplo de aprovechamiento sustentable. Es posible que la empresa crea que el crecimiento sustentable consiste en crecer a costa de los demás.

Es fácil pretender beneficiares de las subvenciones públicas que pagamos todos y no dejar ningún puesto de trabajo en la zona. Lo que si deja es una degradación brutal en el paisaje y en las condiciones naturales que repercutirán negativamente en el turismo de la Ribera Sacra y comprometiendo su declaración como Patrimonio de la Humanidad.
A este respecto el Sr. Benito Carreño, actual alcalde de Parada del Sil fue consultado por ADEGA sobre este proyecto, nanifiesta que el ayuntamiento ya aprobó la memoria inicial, alegando que traerá mucha riqueza para la zona, pero desconociendo los detalles del proyecto. Es responsabilidad de los representantes municipales el enterase de lo que firman y aprueban. La ignorancia y el desconocimiento no justifican la gravedad de las consecuencias de este nefasto acuerdo.

El sr. alcalde no considero la repercusión negativa en el turismo ni en las consecuencias ambientales del proyecto de una obra que durante casi 8 años va generar un escaso volumen de empleo, que será prácticamente nula en la fase de explotación. Por este motivo ADEGA quiere alertar a los vecinos de la ribera sacra y a toda la ciudadanía sobre este desastre animando a todos a expresar su rechazo.